DragonCon en Atlanta, Georgia

En Atlanta, cuando falta poco para que sea agosto, hay una palabra que empiezas a oír en todos lado:

DragonCon.

Para todos aquellos que no están muy familiarizados con las convenciones, puede que no entiendan que son. Son reuniones de auto-proclamados «nerds» y cerebritos a los que les interesan los videojuegos, el cosplay, los cómics y las películas de ciencia ficción. Y por supuesto, las faldas escocesas. Yo no soy muy fan de ninguna de esas cosas, pero me gusta mucho ver a la gente disfrazada de mis superhéroes favoritos, y también he visto un poco de la serie de Doctor Who, así que también me gusta ese fandom. Mi hermana ha ido a DragonCon muchas veces, así que, este año me he ido con ella.

Primero, al DragonCon va muchísima gente. El primer año que se celebró (1987), fueron alrededor de 1 400 participantes. Vamos, lo normal. Pero este año, han ido alrededor de 80 000 personas a la DragonCon. ¡Como para conquistar una ciudad! En Atlanta, el fin de semana del Día del Trabajo, lo más seguro es que todo el mundo se cruce con increíbles disfraces de alienígena o guerreros de videojuegos, pero para saber de que va la cosa, hay que ir a la DragonCon.

Compramos una entrada para el domingo por 50 $ (45 €). Vivimos en las afueras, así que conducimos hasta la estación de metro más cercana para ir a Atlanta en metro y evitar todos los problemas para aparcar. ¡La mejor idea del mundo! Mucha gente se agobia cuando va conduciendo a Atlanta, sobre todo los turistas, así que, recomiendo que vayáis en metro a todos estos grandes eventos.

Es más, el primer disfraz lo vimos en el metro. En la parte de atrás de nuestro vagón había un Flash, un chico de Arrow y un agente de Shield. Sus disfraces eran impresionantes, y me hizo mucha gracia estar compartiendo el metro con superhéroes.

Un consejo: Antes de ir a la DragonCon, mi hermana y yo descargamos la aplicación y vimos la lista de eventos y paneles que se iban a celebrar durante todo el fin de semana. Para los paneles de los actores más famosos, la espera puede llegar a durar horas, así que hicimos un plan para saber con tiempo todo lo que nos interesaba a ver. Decidimos ir temprano para asistir al panel de Matt Smith y después, queríamos ver a Billie Piper por la tarde. Llegamos al panel de Billie Piper una hora y media antes de que empezara y nos tocó ponernos al final de una cola larguísima que le daba la vuelta al edificio. Decidimos que merecía la pena la espera, y nos sentamos y estuvimos hablando con otras de las personas que estaban en la cola. La espera sí que mereció la pena, y me alegro mucho de que organizáramos que paneles íbamos a querer ver, porque gracias a eso no estuvimos dando vueltas sin rumbo y perdiendo el tiempo.

Lo que más me gustó:Ver todos los disfraces. Este año, una de mis películas favoritas fue el de Wonder Woman, así que estuve todo el rato buscando a una Diana y a una Antiope. Las encontramos en uno de los hoteles, y, ¡me eché una foto con ellas!

También vimos grupos enteros vestidos de personajes de Marvel, un R2D2 que funcionaba, y muchos disfraces que mi hermana dijo que debían de ser de videojuegos.

También me gustó mucho poder ver a Billie Piper y escucharla en el panel. Es tal y como me la imaginaba, una persona muy realista. La primera vez que la vi fue en la película Mansfield Park, y poco después, en Doctor Who. Verla en persona fue una experiencia única.

Cosas guays de la DragonCon: Para mi, lo mejor de la convención fueron los disfraces. Dicho esto, lo más seguro es que el año que viene vaya al desfile de la DragonCon, donde enseñan todos los cosplays (¡totalmente gratis!). Si tus actores o escritores favoritos van a asistir a esta convención, si tienes la oportunidad, te recomiendo que vayas a sus paneles o a un meet-and-greet.

También me tengo que acordar el año que viene de llevarme algo de comer y mucha agua. No sabía si nos iban a dejar entrar con comida a los hoteles donde se celebra la DragonCon, y me preocupaba que nos registraran las mochilas, pero este no fue el caso. Podría haberme llevado comida y haber evitado comprar algo de cenar dentro de la convención, porque fue muy caro.

Si vives en Atlanta, estás de visita, o eres uno de los maravillosos estudiantes internacionales vienen cada año, DragonCon es una experiencia única vivirás muchas cosas de las que te acordarás toda tu vida.

¿Ha ido a la DragonCon? ¿Cómo te lo pasaste? ¡Deja un comentario!