¿Aventuras fuertes?, Fuerteventura.

¡ Hola valientes y aventureros/as!

En este post os hablaré de un viaje a Fuerteventura que hicimos una compañera y yo desde Lanzarote.

Mientras trabajaba en el hotel como animadora, coincidian algunos dias libres con otros compañeros, asique cuando apetecía,aprovechamos para conocer otras zonas de Lanzarote u otras islas, aprovechando el descuento del 50% de residente en islas.

En esta ocasión nos decidimos por visitar Fuerteventura, 2 dias y una noche y alquilar un coche allí.

Os cuento como fue la experiencia, que sin lugar a dudas quedará para el recuerdo, por unos motivos u otros.

Cruzando el atlántico en ferry, de lanzarote a fuerteventura.

Fuerteventura es la 4º Isla con mayor densidad de población del archipiélago canario, tras Lanzarote, Gran Canaria y Tenerife y cuenta con una extensión de Norte a Sur de 100 kilómetros.

Cogimos el Ferry en el puerto de Playa blanca (Lanzarote), al sur de la isla, y el precio del billete rondó entre 16-20€, con el descuento de residente incluido, aunque os dejo la página de los ferrys que hacen este trayecto:

https://www.lineasromero.com/ferries/lanzarote-playa-blanca-fuerteventura-corralejo/

https://www.fredolsen.es/es/experiencia-fredolsen/destinos/lanzarote

La duración del viaje es de 40-45 minutos y desde luego no tiene desperdicio, pues los ferrys están muy bien equipados. Yo cuando me monté en él y vi que habia una terraza, con sofás, mesas, sillas y que servían smoothies, dije bueno, pues ya tenemos el viaje hecho.

Para los que no hayáis ido nunca en barco, teneis que probar esta experiencia en pequeñas dosis.

La primera vez que me monté en un ferry tenía 12 años y casi vomito, hablando claro. Y es que el movmiento del mar me marea, como les pasará a muchos de vosotros, pero en esta ocasión, no se por qué fui la mar de a gusto, nunca mejor dicho. Y menos mal, porque hubiera sido una pena no disfrutar de ese viaje y ver como nos ibamos alejando de mi querida isla rumbo hacia Fuerteventura.

Os dejo unas fotos del momento en el barco.

Al llegar a Fuerteventura atracamos en el puerto que se sitúa al norte de la isla, en Corralejo. Este pueblo cuenta con una reserva natural que bordea toda la costa noreste de la isla y tiene unas playas y dunas preciosas, extensiones de arena de kilómetros y kilómetros.

En Corralejo alquilamos un coche con la empresa de Cabrera Medina, que es la más conocida en las islas canarias y con la que ya habia alquilado un coche en ocasiones anteriores, pues aunque el precio de alquiler por día sea algo más elevado, no te piden depósitos estratosféricos para poder alquilar un coche.

El precio de alquiler por día parte de los 30/45€ y tendréis un coche de 3 o 5 puertas, pequeño o mediano tipo Volkswagen, Opel o Citroen; y el máximo no lo sé, pues no me interesé en alquilar un ferrari durante mi estancia.

Aquí os dejo el enlace de su página web: https://www.cabreramedina.com/

Este fue el coche que alquilamos nosotras y además nuestro alojamiento durante la noche que pasamos en Fuerteventura, que fue épica.

Mi compañera, que ya había trabajado en Fuerteventura conocia algunos sitios chulos donde tomar algo, y yo que tengo cierta obsesion con los crepes y el helado, pues paramos en una cafetería con muy buena reputación alli:

Mirad que pintaza tienen los crepes: 

Durante ese día paseamos por Corralejo, y yo que tenía muchisimas ganas de probar el surf encontré una tienda llamada Homegrown donde venden articulos de surf, camisetas personalizadas y merchandising super chulo de la isla y que además ofrecían cursos de introducción al surf de 5 horas al precio de 30€, creo recordar, asique no me lo pensé dos veces y firmé para iniciar mi aventura sobre una tabla.

Y es que Fuerteventura, ya lleva la aventura, casi, en su nombre.

Para aventura la que nos esperaba esa noche gracias a nuestra fantástica idea de dormir en el coche modo camping. Y es que no tuvimos ni tiempo ni ganas para buscar alojamiento ni nada, asique utilizamos el único recurso que teníamos, el coche.

Aparcamos cerca de la playa de Corralejo, y las vistas fueron inigualables, pero claro, resultó que no fuimos las únicas que decidieron pasar una noche en la playa…

Detrás de nosotras había una furgoneta con 4 tios que andaban de arriba abajo merodeando por la playa, con unas linternas, sin hacer mucho ruido… Imagináos la situación, yo estaba muerta de miedo y cualquiera duerme en tal tesitura. Asique pasamos la mitad de la noche haciendo guardia por los retrovisores y sin querer ser vistas,porque como comprenderéis, no queriamos que el final de nuestros dias acabase en una playa de Fuerteventura.

Pero por suerte todo acabó siendo una anécdota muy divertida y al día siguiente ya estabamos listas para disfrutar de nuestra experiencia en esta isla vecina.

Mi primera experiencia surfeando en Fuerteventura.

Como os he mencionado anteriormente, acudí a mi cita en Homegrown para mi primer curso de iniciación al Surf a las 9:00 de la mañana, allí nos esperaba un bus con todo el material y además no iba a estar sola, pues fuimos un grupo de unas 10 personas que se apuntaron a vivir la experiencia.

Primero paramos en una playa para aprender los pasos para subirse a la tabla, incorporarse y remar.

Fue muy divertido y no me resultó complicado, ya que yo soy aficionada al kayak y quizá mi sentido común también participó en este aprendizaje, pues como os digo me pareció bastante fácil hacer los giros sobre la tabla, avanzar o retroceder, eso sí, lo de ponerse de pie ya fue otra historia, pero esta hora de calentamiento y aprendizaje en la playa se hizo muy amena gracias a los monitores y el buen rollo del grupo.

Tras picar algo, volvimos al bús con rumbo hacia la playa que nos vería surcar olas por primera vez, o al menos, ese era mi deseo.

Nuestro destino de Surf fue Rocky point. Como su nombre indica es una playa de rocas, un poco peligrosa para hacer surf bajo mi punto de vista, pero según los montores era ideal, pues las olas eran impresionantes y además aquello estaba abarrotado de gente haciendo surf, yo solo veía tablas y neoprenos aquel dia.

He de decir que tras muchos intentos, no fui capaz de coger una ola de pie, pero, para mi sorpresa, hubo un momento en el cual cogí una ola e hice una buena remada y me senté en la tabla con la cual llegué hasta la orilla a una velocidad tremenda, fue impresionante.

Supongo que los que hayáis probado el surf sabéis lo divertido, pero difícil que es. Y es que esto también fue un pequeño reto personal ya que tengo cierto pánico al agua... Pero los miedos están para superarlos, ¿no?

Desde luego que fue una experiencia única y que repetiría sin pensarlo gracias a los fantásticos monitores que tuvimos.

Os dejo su página web por si os animáis a probar y conocerles, seguro que no os defraudan.

http://www.homegrown.es/prices_s.html

Explorando Fuerteventura.

Al estar acabandose nuestro viaje express en esta isla, decidimos utilizar el coche para lo que se suele utilizar y condujimos hacia el sur de la isla, haciendo paradas en Lajares y La Oliva, que se encuentran en el centro de la isla y que se sitúan cerca del espacio natural de Malpaís de la Arena.

Es curioso como denominan los isleños a las zonas con terreno volcánico, roca negra y una flora característica de las islas Malpaís. Además, los nombres que tienen las caletas y las playas en Fuerteventura son bastante divertidos, como caleta del tio viña o caleta del buen pobre. 

Estas caletas se pueden encontrar si tomáis la carretera de Fuerteventura que sale desde corralejo y recorre la costa este de la isla.

Si váis a Fuerteventura, os recomiendo visitar el Oasis Park, nosotras no tuvimos tiempo, pero es un zoológico y jardín botánico de los más grandes del archipiélago canario y las personas que conozco que fueron a visitarlo decían maravillas sobre este lugar.

Espero que os haya gustado este pequeño post sobre mi experiencia en Fuerteventura.

¡Un saludo y a extender las alas por las Islas Canarias!

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