El maravilloso mundo de Amsterdam

¡Hola chicos! Hoy les contaré sobre uno de mis destinos favoritos en mis viajes como erasmus. Tengo que decirles que conocer Amsterdam era un sueño pendiente que tengo desde el 2014, después de haber visto bajo la misma estrella y saber que allí se encuentra el museo de Anna Frank.

Como les conté en la entrada de París, me encanta ir a sitios que me transportan a mis películas, libros y canciones favoritas. Amsterdam era la combianción perfecta de romance, historia y sobretodo bicicletas (lo cual descubrí cuando estaba allí)

Amsterdam lo recorrí en un día siguiendo un mapa que encontré en google donde me aconsejaban la mejor manera de recorrerlo. Partí desde Bruselas con un amigo de mi infancia que al igual que yo estaba realizando su intercambio en esta ciudad, el trayecto duró aproximadamente 4 horas, y los pasajes los encuentras en 18 euros ida y vuelta.

El clima en Amsterdam:

Mi viaje a Amsterdam fue en a mediados de noviembre, aún es otoño y estamos a vísperas de invierno. La sensación térmica en Amsterdam se siente más fuerte, es decir que aunque la temperatura esté a 10°, podrás sentir que esta a 5°. Para la fortuna de mi amigo y mía, no llovió el día que fuimos. Si vas a visitar Amsterdam, tienes que estar atento al pronóstico ya que suele llover mucho.

Yo desconocía esto de la sensación térmica en Amsterdam, sumado a la brisa y los canales, y fui sin el abrigo suficiente. Al bajarme del autobus a las 10:30am, sentí un frío impresionante, iba con una camisa normal, una chaqueta sencilla y un jean, no llevaba medias térmicas, ni gorro, pero menos mal si llevé mis guantes. Pero como les decía, tuve la suerte de que el día fue soleado y en el transcurso del día la temperatura fue aumentando.

Descubriendo Amsterdam

El primer canal que disfruté fue en el puente Mirakelbrug, para llegar aquí camine desde la estación de bus, atravesando por el Parque Wester. Después de esto caminamos en dirección hacia la Plaza Dam.

Plaza Dam

En esta plaza queda el Palacio Real, es la plaza más famosa de Holanda, la vista es espectacular y es muy hermosa. Se puede decir que es el punto centro de la zona turística de Amsterdam, ya que los demás sitios de interés estan alrededor de esta. Después de estar aquí es muy fácil llegar a cualquier atractivo de esta ciudad. Además también queda el museo de cera Madame Tussadus.

Entre canales y bicicletas

Lo hermoso de esta ciudad y por eso es una de mis favoritas, es que por cualquier calle que camines, observas magia. Pueden no ser sitios turísticos y aún así sentirás el deseo de tomarte una foto en sus calles, observando los diferentes canales y tratando de sobrevivir a las bicicletas.

Algo que tienes que saber de esta ciudad, es que es la ciudad de las bicicletas, por un lado como turista que estaba disfrutando la ciudad caminando, fue un poco incomodo combatir contra esto. Ya que en los semáforos, aunque fuese el momento de cruzar del peatón, las bicicletas también se atraviesan y llega un punto en el que es tedioso lidiar con esta situación.

Anna Frank

Tienes que saber que para entrar a la casa de Anna Frank, tienes que hacer una reserva de cita online con antelación y... adivinen quién no sabía. Por esta razón no pude ingresar a la casa y disfrutar de este museo. Las personas que tienen fascinación por la historia de Anna Frank, pueden disfrutar también de un hermoso mural que hay en su honor.

Para llegar hasta este lugar, donde hay muchos otros murales, debes tomar un ferry que es transporte gratuito de Amsterdam y te permite cruzar por los canales. Es curioso ver como las personas se suben con su bicicleta y van de un punto de la ciudad a otro de una forma eficaz. Para mí como turista, fue genial contar con este sistema de transporte que me facilitó la movilización y que además pude pasar entre los canales. 

Curiosidades

Algo que también me causó curiosidad de esta ciudad, son algunas sillas que hay en los parques para que puedas descansar. Como sabrás, los holandeses se caracterizan por ser altos, bueno en mi caso soy una colombiana de estatura promedio y sentarme en una de esas sillas era algo muy cómico.

Continuando con la travesía de este día, te das cuenta que no hay nada como ir caminando, sobretodo si aprendes a ir con el espirítu de la curiosidad. Hubo un momento del día, en el que decidimos disfrutar de los canales y de las calles, y nos dejabamos llevar por lo que nos atraía del ambiente.

Otra de las cosas que me causó gran curiosidad y que me encantó muchísimo, es que la mayoría de personas que se encuentran en Amsterdam hablan inglés, lo cual te permite comunicarte de forma muy sencilla para buscar indicaciones o cualquier ayuda que necesites. En los diferentes locales, centros comerciales, en toda amsterdam, siempre habrá alguien que pueda ayudarte, a diferencia de países como Budapest, donde a veces saber inglés no es suficiente.

La importancia del asombro

En un momento decidimos ir al mural de Anna Frank que les mostré, y según las indicaciones de google maps debíamos tomar un ferry, en busca del ferry descubrinos un puente (creíamos que nos llevaría al lugar donde tomar el ferry) y así fue como terminamos llegando al museo de ciencia NEMO, que nos ofreció una vista espectacular de toda Amsterdam.

Este momento fue uno de los más grandiosos porque ambos ibamos en busca del ferry y terminamos descubriendo el museo, nos acercamos por nuestro interés en la ciencia, y subiendo escalones por simple curiosidad, llegamos a la vista más hermosa que pude tener de toda Amsterdam.

No sé porqué, pero las guías de turismo no te recomiendan este lugar, y creo que es una panoramica con la misma importancia que la plaza de trocadero para admirar la belleza de París. Por eso te aconsejo que aunque tengas lugares precisos que desees conocer, te dejes llevar también por el espiritu de la aventura.

El distrito rojo

Una de las principales atracciones que te recomendarán todas las páginas a buscar Amsterdam es el famoso distrito rojo. Este distrito es una zona donde está concentrado el libertinaje que caracteriza a esta ciudad: drogas y sexo. 

Antes de viajar a Italia para vivir mi experiencia erasmus, les comentaba a mis diferentes amigos los destinos que quería conocer, y cada vez que mencionaba Amsterdam todos me decían que era la ciudad de la lujuria, lo cual no entendía porqué, hasta que llegué al barrio rojo.

En esta zona, la mayoría de las calles tienen prohíbido el uso de celulares y no puedes tomar fotografías, ya que hay escaparates adornado con luces rojas, donde se maneja el negocio de la prostitución. Mientras caminas encuentras letreros de show de sexo en vivo, pornografía y muchas sexshops, así como también lugares de venta de cannabis. 

Amsterdam de noche

Como les comenté, en Amsterdam solamente estuve un día, así que a esta hora ya era el momento de regresar nuevamente a la estación de bus y regresarnos nuevamente, como yo era mediados de noviembre, había decoraciones navideñas en proceso y fue bonito disfrutar de los mismos canales con la iluminación nocturna.

Por la belleza de sus calles y la magia de los canales, sin dudar alguna Amsterdam es uno de los lugares que tienes que conocer al visitar Europa.

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