Le Palais Rohan

Este palacio se encuentra en el centro histórico de Estrasburgo y es uno de mis edificios favoritos de Estrasburgo por su imagen y elegancia. Es el testimonio del estilo de vida del siglo XVIII, el cual era muy principesco, o de la realeza.

El Palacio Rohan (le Palais Rohan), consta de dos fachadas principales, una da a la plaza de la Catedral, la que hay en el lateral izquierdo de la misma, y la otra da a uno de los canales que pasan por Estrasburgo. La fachada que da a la catedral es la que tiene la entrada principal, y su diseño es como de dos edificios anchos de poca altura unidos por una parte central de menor altura que cuenta con un gran patio. La puerta principal me encanta con estatuas que coronan la entrada, y, el color del edificio también.

En este palacio, ahora se encuentran dos museos:

Museo de Artes decorativas: se encuentra en la planta baja del palacio que consta de dos secciones. La primera sección consta de los apartamentos del rey y los cardenales de Rohan, y la segunda, se encuentras las colecciones de arte decorativas de la ciudad.

Museo de Bellas Artes: se encuentra en el primer piso del palacio. En el se puede admirar la historia de la pintura de Europa desde la Edad Media hasta 1870.

La entrada al museo no se lo que cuesta, pero el primer domingo de cada mes la entrada a los museos es gratis, y, el horario de apertura es de 9 a 12 horas y de 14 a 17 horas.

Yo tuve la suerte de ver el Palais de Rohan desde el campanario de la catedral, y cómo podéis ver en la siguiente foto, no se puede dudar de su estilo real y de lo bello que es.

Las dos fachadas son muy bonitas, pero el Palacio no es muy famoso, ya que me he encontrado con gente que no sabía que edificio era, solo que era bonito. Es de un tamaño pequeño, pero a mi me gusta bastante. Si no fuera porque se que está ubicado en Estrasburgo, diría que es un palacio parisino, de hecho su diseño se inspiró en los grandes hoteles parisinos de la época y, en mi opinión Estrasburgo es como París en pequeño, sin renombre y sin Torre Eiffel.

Si pasáis por la zona de noche no dudéis en pararos a admirarlo ya que con las luces tiene un aspecto más elegante y señorial.